Así es como comenzó en marzo con los tapabocas personalizados. Y logró con esa iniciativa seguir adelante hasta esperar que pase la tormenta. Dentro de las opciones está la de elegir diseños exclusivos con pictografías del artista Gustavo Alejandro Campos, que encontraron un mercado sumamente interesante.
«Con esta idea y otras que nacieron después de la pandemia, al menos, pueden seguir adelante. Trabajé en la firma durante un tiempo y forjé una amistad con el titular de la misma, Leandro Ostrobsky, y cuando le presentamos el trabajo de Gustavo, no lo dudó. Por suerte a la gente parece que también le gustaron y los piden. Con la idea de los tapabocas personalizados encontraron una veta para continuar, porque las ventas on line no rinden lo suficiente y es lógico que en una situación como la actual la ropa deportiva no sea lo que más se venda. Pero esto al menos permite cuidar los puestos de trabajo e ir remándola», consideró Patricia, secretaria del propio Gustavo, que desde siempre admiró la obra del artista, de perfil muy bajo. A Campos se lo conoce más por su trabajo- es abogado- que por sus obras de arte.
«Cuando surgió la idea de los tapabocas personalizados le pedí autorización para plasmar sus dibujos y nos dijo que sí. La idea fue hacer algo diferente. Su trabajo se basa en frases dibujadas. En mi caso, desde que vi lo que hacía, me atrapó por sus formas y colores, y se ve que a otros les pasa lo mismo, porque con el tiempo la gente fue eligiendo esos diseños. Todas las semanas se hacen más pedidos y eso es positivo. Se lo contamos y se puso muy contento».
Desde la imposición del uso del tapabocas se han visto miles de variedades. Hoy es tendencia mundial y un accesorio que obliga a la gente a buscar el que le sienta más cómodo y sea más acorde con su personalidad.
Los barbijos con las pictografías de Campos o toda la información para poder hacer los que uno quiera se pueden encontrar en Instagram en @QuartoHockey o www.quartosports.com
Hacé tu comentario