El cuartel está ubicado en 315 entre 364 y 365, conformado por 35 bomberos, un autobomba, trajes y materiales necesarios para funcionar. Sin embargo, al no contar con la firma del intendente no pueden tramitar la personería jurídica.

» Desde que comenzamos con los papeles de habilitación, el Ejecutivo local nos puso traba, se comunicó con la Federación de Bomberos Voluntarios para que no nos ayude y con Defensa Civil para que nos cajoneé el expediente. Hemos hablado varias veces con el Honorable Concejo Deliberante y nos dieron vueltas, nunca tuvimos una reunión seria con el intendente, Juan Patricio Mussi. Por ese motivo, no podemos avanzar y no entendemos el por qué no quiere que ejerzamos un servicio fundamental para Ranelagh», manifestó el referente del proyecto, Walter Pereyra.

» Hicimos un relevamiento en 9 días, hubo 3 incendios a dos cuadras de nuestro cuartel, otro a 6 y otro a 7, un radio corto; pero al no tener el aval del intendente, no podemos actuar. Los Bomberos que ejercen en la zona pertenecen a Hudson y corresponde a la Policía de la Provincia de Buenos Aires, ellos cubren la zona, pero tiene 7 kilómetros de recorrido, desde al lugar hasta el epicentro de Ranelagh y ese trayecto se transforma en 25 minutos, ellos dicen que tardan entre 5 a 10 minutos, pero todos los damnificados dicen que el tiempo que tardaron es menor tiempo es 25, algunos casos 30, 40, 1 hora y casos que no llegaron nunca. Cuando una vivienda tarda alrededor de 7 minutos en incendiarse, más si es precaria», especifico el bombero.

Este año, los Bomberos de Ranelagh en Formación como se hacen llamar por el momento, enviaron un pedido de ayuda a la gobernadora, María Eugenia Vidal. » Esperamos que nos cite y poder comentarle la necesidad de un cuartel en la zona. Tenemos relevamiento y el apoyo del vecino que quiere que estemos habilitados», comentó Pereyra.

Y aclaró: » Nosotros somos bomberos voluntarios, no tenemos banderas políticas, ni tampoco buscamos un redito económico, nuestro fin es un servicio solidario y de rescate, evitar los incendios y salvar vidas».

«Nosotros hablamos con la gente del barrio, y todos están de acuerdo con tener un cuartel en la zona, comenzamos en el año 2017, cuando se prendió fuego un departamento del barrio luz y lamentablemente falleció un señor que no habían operado y estaba en reposo. Ahí los vecinos vieron la necesidad de abrir un cuartel de bomberos, me llamaron a mí, porque hace 11 años que fui bomberos de Quilmes, y tres en Hudson, allí comencé con el proyecto y armé un equipo de 35 personas y los sábados brindamos capacitación. Llevamos más de 500 mil pesos gastados entre materiales y papeles. Tenemos todo lo único que nos falta es el apoyo del Municipio para poder tramitar sin ningún problema la habilitación», concluyó Pereyra.

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