Los vecinos indicaron que ante los innumerables reclamos que se hicieron, «no huno nunca respuesta», ya que «al ser Camino General Belgrano una ruta, se tiran la pelota unos a otros y en definitiva nadie se hace cargo, ni nación, ni provincia, ni el municipio. Lo mismo pasa con la iluminación, es lúgubre y espantosa. Por eso ocurren tantos accidentes. Este camino esta mal señalizado, y esta todo poceado. Hace años que los funcionarios miran para otro lado».
El martes pasado, el conductor de este auto azul, terminó en un zanjón cuando intento esquivar un gran pozo y tuvo que abrirse. De milagro no fue una tragedia ya que quedo de la mano contraria la que circulaba.
El sábado, otro auto, en el mismo lugar, quedó con las cuatro ruedas para arriba, pretendiendo hacer la misma maniobra.
Una de las cosas que también preocupa a los lugareños son las malas condiciones de las veredas y el peligro para quienes transitan por ellas, mas cuando suceden este tipo de accidentes.
«El bache es tremendo, es cada vez más grande y profundo. Incluso hay quienes estropearon el tren delantero y claro nadie se hace cargo. Un automovilista rompió las dos ruedas porque lo agarro de lleno y nadie es responsable, claro».
Por el momento e intentando evitar otros accidentes los frentistas pusieron carteles sobre el pozo pero que no será seguramente una solución a largo plazo.
«Toda la zona esta minada de pozos. Este esta cerca de un lugar que vende piedras, pero hay más en todo el recorrido, por ejemplo, en la esquina del Club Los Quilmes» apuntó otro vecino. Incluso los más viejos recordaron que muy cerca de ahí hace algunos años, se produjo un triple choque y uno de los autos se prendió fuego. Otro quedó en el zanjón y otro colgado a punto de entrar en una casa. Como resultado hubo varios heridos.
«Esperamos que en algún momento nuestros reclamos lleguen a la gente responsable de tomar decisiones concretas. Solo pedimos que tapen los pozos y que en lo posible corten algunos árboles que interrumpen la visual y eso, también produje muchos choques que no llegan a ser graves, a veces, pero que si algún vehículo viene a gran velocidad puede resultar desastroso. Acá pasan muchos camiones y colectivos. Alguien tiene que escuchar. Lamentablemente ya tuvimos muchas muertes y no queremos seguir llorando a más gente», indicó un frentista.
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