Los cigarrillos electrónicos son dispositivos a batería que calienta una solución líquida (que contiene en algunos casos nicotina, y en otros no) y la convierte en un vapor. Hace muy pocos años que ingresó al país y de inmediato captó a miles de usuarios que buscaban a través de este método dejar de fuma, o disminuir los riesgos que produce la nicotina. Lo cierto es que hubo muy poca información sobre los daños que podría contraer, a partir, del año pasado y con nuevas víctimas se empezó a alertar sobre su uso.
En Argentina es muy fácil conseguir, hay tiendas exclusivas dónde se puede comprar tanto el cigarrillo, como los líquidos vaporizadores de diferentes sabores. En Berazategui hay dos grandes lugares ubicados en el centro, uno se encuentra en Lisandro de La Torre al 1500 y otro queda sobre avenida Mitre al 750, asimismo, se puede conseguir en diferentes casas de electrodomésticos distribuidas en otras zonas como Hudson o Ranelagh. También, muchos berazateguenses se dirigen a Quilmes dónde se encuentra la sucursal de Hangsen, una de las principales tiendas.
«El vapor que sale del cigarrillo electrónico no es agua, contiene sustancias que son adictivas y pueden causar enfermedades en los pulmones. Los cigarrillos electrónicos siguen siendo bastante nuevos y se necesita más investigación, pero se comprobó con algunos datos recientes que su consumo a largo plazo genera enfermedades pulmonares, cardíacas y cáncer. También, otros efectos en la respiración, dolor de pecho, en ocasiones acompañado de náuseas, cansancio y fiebre», señaló la doctora Adriana Millares.
Además, la médica indicó: «La gente que usa los cigarrillos electrónicos también fuma tabaco y hay otro grupo de gente que consume este nuevo producto, porque cree dejar de fumar»; en esta línea, aconsejó: «Las personas no deberían consumir estos productos nocivos para dejar de fumar o reducir su adicción al cigarrillo; lo mejor es utilizar los métodos aprobados por las entidades de salud, bajo ayuda médica y psicológica».
Por otro lado, especialistas norteamericanos han detectado elevaciones de cotinina en la sangre en no vapeadores expuestos al cigarrillo electrónico, también se han detenctado otras sustancias químicas en los fumadores pasivos.
Asimismo, se han producido informes de cigarrillos electrónicos que han explotado y causado lesiones leves por baterías defectuosas o porque no se manejan de la forma adecuada.
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