Ante la abrupta subida del dólar blue que se produjo recientemente y que impactó de forma directa en los precios que se ven en las góndolas, La Palabra realizó un relevamiento por distintos comercios de barrio para consultar si tenían stock o faltantes de mercadería, con qué frecuencia remarcan precios y si variaron los hábitos de compra de los clientes. La mayoría coincidió en que la inestable situación económica complica lógicamente el día a día. Es que la inflación no frena y el costo de vida en el mes de abril promete seguir por las nubes.
Agustín, del almacén de 131 entre 15 y 16, expresó: «De stock tenemos bastante de todos los rubros, casi no hay faltantes. Después tenemos que remarcar precios todos los días porque constantemente nos venden los proveedores con aumento. Los porcentajes varían según el producto. Los hábitos de los clientes cambiaron porque con las subas que hay se consume menos hoy por hoy. Por ahí compras cuatro cosas y ya te salen $2.000».
Mayra, del autoservicio «El Castillo», comentó: «Acá trabajamos con lo justo. Lo que nos falta lo tratamos de reponer. Pasa que sube todo y cuesta bastante acomodarse. Encima ahora con el aumento del dólar la gente consume menos que antes. Lo que sí, por lo general, remarcamos los precios cada cuatro o cinco días».
Alejandra, del autoservicio «Alejandra», señaló: «A veces hay faltantes. Cuesta reponer. Porque los proveedores no siempre nos entregan los productos y ahí se complica. Tenemos que subir todos los días los precios porque es la única forma que quede ganancias. Con respecto a los hábitos de compra pasa todos los meses lo mismo, aunque ahora se nota más que la gente no llega a fin de mes. Los primeros días compran primeras marcas y en cantidad, a mitad de mes ya es optativo y se reducen las ventas, y ya para fin de mes no te compra nadie y los que lo hacen se llevan segundas marcas».
Marcos, del almacén «Melu y Gaby», indicó: «Tenemos stock por lo general. A veces nos falta mercadería, pero tratamos rápidamente de ir a comprar. Cada quince días subimos los precios porque es el tiempo en que los proveedores nos remarcan a nosotros. Y se siente el cambio de hábito de los clientes ya que ahora hay menos movimiento y te compran en menor cantidad».
Por su parte, Alejandra del autoservicio «El Milagro», sostuvo: «Faltantes hay pocos. Tratamos de mantener dentro de todo un stock. Con respecto a las remarcaciones, lo hacemos todos los días. Y sobre los hábitos de compra la gente últimamente vive con lo justo, no hay mucha plata y eso sin duda influye».
Mientras que Nancy, del autoservicio «Miguel», manifestó: «Hay stock acá. Se producen faltantes pero de marcas específicas. Pasa que las cosas las tenemos que subir constantemente, no es la idea remarcar todo el tiempo, pero a veces no queda otra. Y la gente lo nota. Por eso casi nadie compra en gran cantidad hoy en día».
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