Rubén Comparato, de 59 años, falleció como consecuencia de Covid-19, después de haber estado internado en terapia intensiva en la Clínica Privada de Ranelagh. El propio intendente municipal lo despidió con un afectuoso comentario por su labor legislativa.

El reconocido militante político, que ocupó una banca en el Concejo Deliberante local por el Frente Renovador entre 2015 y 2019, nació en Capital Federal, pero inmediatamente se mudó al barrio La Porteña, en Hudson. Estaba casado con Mabel Días, actual concejal por el Frente de Todos, y tenía dos hijos, Nicolás y Antonella.

Comparato comenzó a militar a los 20 años. Su papá, también militante peronista, falleció cuando era muy pequeño. Sin embargo, casi como un forma de recordarlo, Rubén se alistó en las filas peronistas. «Yo siempre dije que papá llevaba en la sangre el peronismo, por más que no lo hubiese compartido al mismo tiempo junto a su papá», dijo Antonella, su joven hija, quien contó además que su padre convivía con fotos y recortes periodísticos de la militancia de su abuelo.

Como concejal -provenía de la línea del Sindicato del Vidrio-  presentó varios proyectos, entre ellos la creación de la figura del Defensor del Pueblo de Berazategui, la creación del Banco de Medicamentos Solidarios y la realización de una campaña de Donación de Medicamentos cuyo lema era «La Donación salva vidas». Además, estaba sumamente comprometido con la realización del proyecto Estaciones que transformaba a la vieja casona que está en la estación de Ranelagh, destinada históricamente al jefe de estación, en un polo de expresiones culturales.

Además, presentó otro proyecto ligado a la educación en el que pidió realizar un convenio con la Universidad de Buenos Aires para lograr un anexo en Berazategui, con todo lo que eso significa.

Comparato amaba y valoraba mucho lo antiguo y coleccionaba, sobre todo, lo que produjo la industria nacional en momentos de la presidencia del general Juan Domingo Perón. No era secreto que en su oficina de bloque había una antigua moto restaurada, que era visitada entre quienes llegaban el recinto.

Siempre tuvo una excelente relación con sus compañeros del concejo, quienes resaltaron su buena predisposición y en estos momentos tan difíciles compartieron viejas anécdotas .

«Mi papá era un tipo muy trabajador, responsable y comprometido con los demás. Su labor fue intachable y estaba incondicionalmente para todos. El es mi ejemplo a seguir junto a mi mamá», expresó Antonella.

Fanático de Boca, compartía con su hija esa pasión futbolera. Tenía sueños y proyectos por cumplir que no pudieron concretarse, como sucede en muchos de los casos donde termina decidiendo el Covid 19.

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