«El estado del sistema de salud en toda la provincia de Buenos Aires es preocupante, se encuentra al límite, con un porcentaje alto de ocupación de camas que supera el 95 %, guardias abarrotadas, terapias llenas, falta de personal y equipo de salud agotado», indicó la secretaria general de Cicop del Hospital Evita Pueblo, Carina Acevedo.
Y explicó la necesidad de un «presupuesto de emergencia para garantizar personal del equipo de salud no precarizado, la infraestructura y los elementos de protección personal (EPP) que se necesiten para enfrentar la suba explosiva de casos».
«Estamos atravesando el peor momento de la pandemia, es fundamental que desde el gobierno se destine un presupuesto que cubra al sector crítico y se generen nombramientos de personal», subrayó.
En relación a la situación actual del Hospital Evita Pueblo, la delegada puntualizó: «Como todos los hospitales de la provincia de Buenos Aires está teniendo una demanda muy grande de pacientes que requieren oxígeno y cuidados extremos; llegamos al punto de no dar abasto con las camas y con los trabajadores desbordados por el ritmo laboral que se está presentando en estos días críticos. El nosocomio necesita personal, una mayor inversión para afrontar la segunda ola y mejores salarios».
También el sindicato de médicos bonaerenses reconoció las medidas adoptadas por los Gobiernos nacional y provincia, avisó que «aún no han impactado en forma significativa en la curva de casos», por lo que piden «mayores restricciones» en los próximos días.
«Comprendemos que hace falta un tiempo prudencial para terminar de evaluar el impacto, desde los lugares de trabajo vemos con claridad que hacen falta medidas más contundentes para disminuir la circulación de personas y no solo los contagios, sino también la demanda que ya no puede absorber el sistema», sostuvo Acevedo.
«Desde el sindicato afirmamos que existe consenso respecto al actual cierre de actividades, aunque algunos sectores cuestionen de forma pública esa estrategia», indicó.
Además, argumentó que con el 15% de la población vacunada con una dosis y el 1,9% con ambas dosis «es necesario ganar tiempo para inmunizar a todos los grupos de riesgo y aumentar la velocidad de vacunación». Por ese motivo, expresó que «se requiere una mayor restricción de actividades con apoyo social y preservación del trabajo y salario».
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