Las subas superan a la inflación, lo cual genera enormes inconvenientes a quienes deben comprarlos.

De forma permanente los compradores se sorprenden al tener que abonar la compra de la farmacia. Sucede que los precios de los medicamentos suben de manera sostenida y por encima de la inflación. Ello repercute en que muchas personas no puedan comprar todos los remedios que necesitan, debiendo optar de acuerdo a las limitaciones que el bolsillo les impone.

En una recorrida por el distrito, lapalabradeberazategui.com.ar entrevistó a farmacéuticos para que expresen los motivos de la realidad descripta.

En ese sentido, una de las comerciantes que mejor resumió la situación fue la titular de Beguifarma, quien sostuvo: “Los precios los ponen los laboratorios, a nosotros nos llega el medicamento con el valor ya establecido, y no tenemos otra opción que trasladárselo al cliente”.

Una realidad compleja que afecta a todos los eslabones de la cadena, pero en la que el mayor perjudicado, como siempre ocurre, es el ciudadano común.

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