Feliz, obtenido el título mundial y después de festejar con sus amigos, regresó y se puso a terminar la obra que mide tres metros cuadrados y que terminó cerca de la madrugada del lunes. «La gente pasaba y me tocaba bocina, me sacaba fotos. Era una fiesta. En la oscuridad fue difícil pintar, pero lo logré y después le hice un par de retoques, pero no mucho». La camiseta del futbolista ya tiene las tres estrellas que corresponden al tercer campeonato obtenido por la Selección. «Esa expresión que tiene Messi en el mural es muy de él, por eso decidí jugarme y hacerla, aunque sabía que no siempre queda bien. Pero lo identifica cada vez que hace un gol. No es fácil, pero siento que lo logre». Cristian dice que este y otros murales que hizo del ídolo son un poco «homenaje al jugador» por darnos tantas alegrías.
“Sentí que tenía que homenajear a Messi en vida, porque se lo merece”, contó el artista, que trabajó unas ocho horas para poder terminar la obra», expresó y agregó: “No me preguntes como, pero sabía que Argentina iba a ganar, y por eso lo empecé antes de la final con Francia… es más, casi lo hago con la copa, porque estaba muy seguro”, dijo confiado.
En el mural se lo puede ver a Leo con los brazos extendidos, como es característico en sus festejos, y con la boca abierta como gritando gol; tiene la camiseta de la selección, la cinta de capitán, y hasta los tatuajes del Capitán argentino.
Orgulloso de su obra, dice que ahora está esperando alguna propuesta para pintar a Messi en Berazategui. “Ahora quisiera hacer uno en Berazategui», adelantó el artista que espera alguna propuesta.
Cristian nació en Quilmes, pero vivió la mayor parte de su vida en el barrio El Progreso de Berazategui. Fue parte del grupo de Arte Público municipal por un tiempo y luego comenzó a hacer trabajos por su cuenta. En pandemia, ante la falta de oportunidades, comenzó a pintar letras para negocios. «No es lo que mas me gusta, pero tengo que comer y vivir. Así que cuando no pinto murales me defiendo con las letras. Siempre, desde que me acuerdo, desde chiquito me encantó pintar y dibujar, pero nunca pude asistir a una escuela de arte. Soy autodidacta y aprendí de ver y probar».
Alonso pintó los animales que están en el frente de la sede de Zoonosis municipal, comics en el Centro de Actividades Roberto De Vicenzo, y vendió obras en la Feria del Libro Librarte. También pintó los pájaros en Ducilo, frente a la Plaza San Martín. En Quilmes tiene un Maradona en Panamá y Bogotá. «Era un hombre que estaba cansado de los graffitis, entonces le propuse hacer un mural de Diego y hace dos años nadie más tocó la pared». «También -recuerda- hizo un mural en la Villa 31 que le pidió el veterinario Juan Enrique Romero.
Un aula del jardín de infantes N° 931 del barrio San Juan lleva su nombre. Pintó un mural de Javier Villafañe y charló con los alumnos. Al ver su humildad y su destreza, docentes y directivos lo homenajearon con esa grata sorpresa.
Tiene más obras de Messi que están a la venta y espera más propuestas de este mundial que llevará por siempre en el corazón. Su contacto es el 114089-0090.
No hace mucho Cristian perdió a su esposa a causa de una enfermedad, alguien que supo acompañarlo en los últimos años en esta «locura del arte callejero». El poder pintar a sus ídolos hace que la pena sea menos pesada y el camino menos amargo.
Hacé tu comentario