El letrado consideró que el periodista fue partícipe necesario de la maniobra en la cual se le pidió a Traficante el pago de 600 mil dólares para no quedar involucrado en la causa judicial por contrabando de mercaderías conocida como «la mafia de los contenedores».
Según Rodríguez, Santoro «tuvo un importante rol en el suceso criminal investigado teniendo incidencia directa sobre la credibilidad de los dichos de Marcelo D´Alesio hacia Traficante». Lo culpó de «intimidación moral» y expuso que «introdujo información falsa para contribuir en una extorción en curso». Cabe señalar que D´Alesio es un falso abogado que ahora esta detenido.
Repudio de Adepa
Ante el procesamiento de Santoro la Asociación de Entidades Periodísticas Argentinas (ADEPA) mostró su preocupación «por la resolución del juez Rodríguez», cuando no hay pruebas de que el periodista haya actuado con dolo o haya recibido un beneficio económico de parte del acusado».
«La resolución pretende utilizar una conducta incuestionable, como llamar a una persona a la que se va mencionar en un artículo periodístico y pedirle su versión de los hechos, para atribuirle una intención reñida con la profesión».
Además, la Asociación reiteró que «no deben confundirse las conductas o los antecedentes que posean eventuales fuentes de información periodística con el trabajo que hacen los profesionales de prensa para llevar datos de interés publico a conocimiento de la audiencia», habida cuenta que el propio Santroro explicó en múltiples oportunidades que su tarea periodística se realizó al margen de las maniobras de D´Alesio y que él desconocía.
Adepa confía en que en «las siguientes instancias judiciales prime la sana doctrina que consagra la amplia protección del trabajo periodístico como herramienta de auditoría y de la libertad de prensa como institución indispensable del sistema democrático, y espera que se revea el procesamiento al periodista».
Por su parte Santoro expresó en redes sociales: «El juez Luis Rodríguez me procesó sin una sola prueba de que yo participé o sabía de un intento de extorción», y agregó: «lo absurdo es que una consulta que le hice a Traficante antes de publicar la nota es una prueba de extorción. ¿Debería haberlo llamado un día antes de publicar?”, preguntó.
En el mensaje Santoro se presenta como periodista de Clarín, le pregunta si es el teléfono de Traficante y expresa que le gustaría «hacerle una pregunta periodística», a lo que agrega el teléfono de la redacción. El periodista añadió y dio conocer en las redes esa conversación de Whats App fechada el 25 de noviembre de 2016, donde se lee el pedido de consulta periodística que nunca obtuvo respuesta.
El trabajador de prensa agradeció los mensajes de apoyo y dijo que sus abogados ya estaban preparando la apelación a la Cámara Federal por un fallo que describió como «injusto, arbitrario e infundado».
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