Recuperar la gestión cultural

Que nos posibilitan ver la realidad de modos nuevos. En la Provincia de Buenos Aires, existe un Ministerio de Gestión Cultural, creado a fines de 2015 por la gestión de María Eugenia Vidal, que no le hizo honor a ese concepto.
Cada cierre de año fiscal en el Estado obliga a tener las cuentas claras. Más aún cuando se trata de cierres de gestión. En la Provincia, el Tribunal de Cuentas observa cada número que no cierra y pide justificación. Cuando no la recibe, aplica sanciones económicas a personas físicas.
La ejecución del presupuesto del Poder Ejecutivo tiene que rendirse y a veces, no puede explicarse. Es una de las razones por las que podría entenderse que María Eugenia Vidal haya firmado en octubre pasado el decreto que ajustó la estructura del Ministerio de Gestión Cultural y le quitó jerarquía al Archivo Histórico “Dr. Ricardo Levene”, la Dirección de Bibliotecas, el Museo Histórico “Guillermo Hudson” y hasta varias direcciones del prestigioso Teatro Argentino de La Plata.
Los argumentos se basan en “principios de austeridad, eficiencia administrativa y modernización”. La medida incluye el recorte de las direcciones de Promoción Literaria, de Promoción de Derechos Culturales y de Asistencias Artísticas de la cartera cultural.
Es que desde diciembre de 2015, cuando se aplicó rápidamente la reforma de ley de Ministerios y el Instituto Cultural bonaerense se convirtió en Ministerio, las únicas acciones que se realizaron desde esa cartera fueron el ciclo de recitales “Acercarte” y los festivales “Provincia Emergente”, pero no hubo actividad de promoción cultural en municipios -excepto en villas de emergencia y como complemento de otro programa-, ni trabajo integrado con municipios, escuelas y tampoco en el Teatro Argentino, que estuvo “en refacción” durante los últimos cuatro años. Para poder justificar aquello que no se hizo, una manera es achicar la estructura.
Según el nuevo organigrama, tanto el Archivo Histórico como la Biblioteca pasaron a depender de la Dirección Provincial de  Museos y Preservación Patrimonial. Desde la Universidad Nacional de La Plata, el Departamento de Historia de la Facultad de Humanidades levantó su voz de alarma: es que un lugar que atesora documentos y materiales invaluables y únicos no puede carecer de una conducción especializada.
El Archivo conserva, entre otros, documentos originales que dan cuenta de la rica historia bonaerense, tales como manuscritos del Martín Fierro; del empréstito de la Baring Brothers; del Acuerdo de San Nicolás; de la causa seguida a Juan Moreira o el expediente Barranca Yaco por la muerte de Facundo Quiroga. Merecen ser cuidados por el Estado de manera responsable.
En tanto, la Dirección de Bibliotecas tenía a cargo la Biblioteca Central y la Biblioteca Braille. Y una de sus tareas sustanciales era sostener las bibliotecas populares, a través de entrega de subsidios.
La historia, el patrimonio y la memoria de los bonaerenses deben ser conservados y custodiados, para lo que se necesita incorporar profesionales y nuevas tecnologías, en lugar de recortar presupuesto y autonomía. Es de esperar que la nueva gestión que asume el 10 de diciembre ponga en valor la cultura en sus distintas formas y devuelva al Archivo Histórico, creado en 1925, su misión y jerarquía.