Avanzar en políticas de género

No hay dudas de que este es un rol novedoso para el Estado y que en los últimos años se han presentado debates en la opinión pública y en el Congreso que reflejan preocupaciones y problemas de la sociedad argentina actual. La despenalización del aborto fue uno de los más intensos. Subyacente desde siempre, encontró la voz durante la gestión de Mauricio Macri, quien habilitó la discusión pública y política, en un tema al que el kirchnerismo no se le había animado.
La alarmante cifra de femicidios que ocurren en Argentina -sólo en 2019 hubo 290 contados hasta el 25 de noviembre- un dato de la realidad que ningún gobierno puede ni debe ignorar. La desigualdad en los ingresos de mujeres y varones por trabajos de características similares, los casos de abuso sexual en ámbitos laborales y la falta de perspectiva de género para resolver conflictos que afectan especialmente a las mujeres: todos desafíos para un futuro mediato.
Los primeros pasos desde el Ministerio de las Mujeres, Políticas de Género y Diversidad Sexual bonaerense fueron concretar una primera reunión con las áreas municipales responsables de las políticas de género. Y presentarles el Consejo de Articulación de Políticas de Género y Diversidad Sexual.
Con la presencia del gobernador Axel Kicillof, y la vicegobernadora Verónica Magario, la ministra Estela Díaz recibió en La Plata a representantes de casi cien distritos: “Nos parece una clave de la gestión lo que tiene que ver con la transversalización de la perspectiva de género en todos los poderes del Estado, pero la territorialidad es otra clave central, que está en sintonía con indicaciones que el gobernador nos ha dado a todos los ministerios, que la política se hace en el conjunto de la provincia y con los municipios“.
Una de las palabras que más se escuchan en estos equipos es “deconstrucción” ¿Y qué es lo que hay que “deconstruir”? Mandatos, estereotipos, lugares aprendidos que subestiman a las personas por su género, que le asignan características basadas en el binomio mujer-varón sin tener en cuenta que existe la diversidad sexual, que todos somos iguales ante la ley en derechos y obligaciones, más allá del género.
El propio Gobernador señaló: “Yo mismo estoy en un camino de deconstrucción, pertenezco a una generación, a un momento de la historia, soy hijo de una determinada forma cultural, social, política y familiar. Por eso no sólo estamos reconociendo en el Ministerio a estos derechos y necesidades, sino que estamos reconociendo a los actores políticos más novedosos y progresivos de la sociedad. Si yo digo, como gobernador, que estoy en deconstrucción, tenemos que decir que también lo tiene que estar el Estado y la provincia de Buenos Aires.”
Y la voz de Verónica Magario, vicegobernadora, también promete un espacio interesante de trabajo: la Legislatura, “que está abierta para empezar a legislar en pos de las políticas que necesitamos las mujeres y la diversidad sexual”.
Que este sea el tiempo de todos, porque no se trata sólo de las mujeres. Se trata de encontrar nuevas maneras de respeto y convivencia sin violencia, con mayor tolerancia y aceptación de las diferencias. Una verdadera transformación social y cultural en la que el Estado tiene mucho por hacer.