La Palabra salió a recorrer algunos almacenes de barrio. La mayor parte de los comerciantes indicaron que en los últimos días no se registraron grandes aumentos, pero «los precios siguen siendo altísimos.  Los lácteos, sobre todo, llegaron a un techo creo, lo que desalentó su compra. La gente lleva la leche justa y apenas una pequeña porción de queso para cocinar, ya que por ejemplo el cremoso está por encima de los 500 pesos y el sardo 750 el kilo», indicó Alicia, propietaria de un comercio en Ranelagh. La mujer destacó, asi mismo, que la manteca «bajó entre cinco y diez pesos» y algunas bebidas también, aunque «es poco perceptible».

Otros productos de almacén como la azúcar, la yerba y el aceite permanecieron igual que el mes pasado. «Subieron ya lo suficiente, ahora hay que ver qué pasa con el resultado de las elecciones. Igual que el pan, entre diciembre y marzo salió disparado, pero ahora hace un par de semanas que no lo tocan», subrayó Hernán, de un supermercado de Barrio Marítimo, que confirmó que los fiambres y embutidos sí subieron, pero no demasiado. A veces vamos cambiando de marcas para ofrecer mejores precios y que la gente no se espante», confió

En el caso de la carne sí tuvo una baja de casi 100 o 150 pesos por corte. «Teníamos las milanesas a 780 pesos y hace tres semanas bajamos a 670. Parece que no, pero se siente en el bolsillo. El asado también estaba tocando los 650 pesos y hoy está 550, de buena calidad. Los cortes más populares bajaron en agosto, aunque las achuras y los embutidos continúan al mismo precio», definió Roberto, que tiene su negocio sobre Dardo Rocha y cuenta que muchos clientes «ya no compran más por kilo, y por el contrario si llevan pulpa para milanesas las cuentan y llevan uno o dos por cada comensal».

«Vemos un poco más de movimiento los primeros días del mes, pero después el resto de los días es muy pobre. Ni siquiera los sábados hay gran demanda. Para mantener un negocio abierto tenés que trabajar más horas que antes y tratar de tener todo a módico precio. En muchas oportunidades hasta asumimos los aumentos los comerciantes para que la gente no lo sienta tanto», sostuvo Raúl, de otra carnicería.

Las frutas y verduras también tuvieron un ajuste. «El tomate volvió a trepar a los 100 pesos por algunos días, igual que la lechuga que llegó a costar 140 el kilo. Pero está muy a precio la acelga y la espinaca, por lo que la gente se vuelca más a las verduras de estación», dijo Julián que atiende una verdulería en la avenida 14 esquina 136. «El brocoli llegó a costar 100 pesos cada uno y hoy está a 40 pesos, más o menos». En este rubro lo que se mantiene «por las nubes» es la fruta como la manzana, el  kiwi y la pera, mientras que las mandarinas, naranjas y bananas continúan con el mismo valor que hace casi dos meses.

«Yo no compro más mensualmente, voy comprando lo que voy necesitando. Y cuidándome mucho. Racionalizo lo que cobro, porque sino, no llego a fin de mes», indicó Aida, una jubilada de 69 años.

Las que sí aumentaron más de los esperado son las prepagas y las escuelas privadas, que pegaron un gran salto en julio y agosto, por lo que vienen castigando a los clientes desde principio año.   

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