Así lo determinó un informe anual del Centro de Profesionales Farmacéuticos (Ceprofar), que sostuvo «con grandes variaciones de precios entre las distintas marcas, los medicamentos terminaron aumentando un 0,6% por encima de la inflación general durante 2022».

Esto es así porque, medidos los precios de los medicamentos al finalizar 2022, los aumentos fueron en promedio general del 95,4% durante el año, mientras que el Índice de Precios al Consumidor (IPC) del INDEC se ubicó en 94,8% para todo 2022. Aunque los medicamentos de venta libre subieron un 100,3% y encima el relevamiento mostró que algunos remedios de los más comercializados aumentaron muy por encima de ese valor, observándose una gran dispersión en los precios. Lo que habla claramente de valores que en algunos casos fueron muy superiores a la inflación anual del año pasado.

«Los que más aumentaron son los de venta libre, que están fuera de los acuerdos impulsados por el Gobierno, con picos de hasta el 137% en medicamentos muy usados«, señaló el comunicado de la entidad profesional.

Según el relevamiento además, considerados los distintos grupos farmacoterapéuticos, los medicamentos de venta libre aumentaron 100,3%, los recetados más usados el 93,6%, los más recetados a través de obras sociales y prepagas un 93,1%, los de uso pediátrico un 96,6% y los anticonceptivos un 93,6%.

En el ranking de los remedios que más subieron en 2022 se encuentran: Diclofenac, que pasó de $355,77 a principio de año a los actuales $846,10, acumulando una suba de 137,8% en 2022; Paracetamol, pasó de $392 a $932 (137,8%); jarabe pediátrico antitusivo subió de $800 a $1850 (131%), crema antimicótica Bifonazol, aumentó de $ 800 a $ 1.789 (123%).

También figuran: levotiroxina, que pasó de $1.410 a $ 2.800 (104%), ibuprofeno aumentó de $ 447 a $902 (102%) y clonazepam, subió de $ 1.135 a $ 2.270 (100%).

A su vez, de acuerdo al estudio de Ceprofar, se observa una distorsión en los precios con grandes diferencias entre los precios de distintas marcas de un mismo medicamento que llegan hasta siete veces entre la marca más cara y la más económica en medicamentos muy usados.

Por ejemplo: omeprazol (antiulceroso) 7,2 veces entre la marca más cara y la más barata, losartan (antihipertensivo) 2,2 veces, clopidogrel (antitrombótico) 4,2 veces, paracetamol (analgésico) 1,8 vez, ciprofloxacina (antibiótico) 4,2 veces, ibuprofeno (analgésico) 2,3 veces, salbutamol (broncodilatador) 5,6 veces, enalapril (antihipertensivo) 1,8 vez, entre otros.

«Esto se explica por el bajo cumplimiento y deficiente difusión de la ley 25649 de prescripción por nombre genérico», advirtió la entidad.

Hacé tu comentario

Por si acaso, tu email no se mostrará ;)