Hasta el momento, los comercios minoristas de barrio tuvieron dificultades para encuadrarse en el programa de precios, debido a que los valores de los mayoristas, donde compran gran parte de los productos, no permitían asegurar un margen de rentabilidad suficiente, según argumentan desde el sector.
La situación es complicada en las tiendas de barrio.
El encargado del almacén «San Jorge» sostuvo: «Lo de los Precios Cuidados nos está matando…lo que ocurre es que se consiguen determinados productos en los hipermercados a un valor más accesible y la gente prioriza directamente esos lugares. A nosotros eso nos perjudica mucho».
En esa misma línea, el dueño del comercio «Los Buscas» señaló: «Acá no trabajamos con Precios Cuidados, aunque nos vendría bien tenerlos. Sube todo y nos vemos obligados a aumentar, entonces la gente va a los distribuidores donde está todo más barato».
Por su parte, la propietaria del almacén ubicado en 112 y 15, aseguró que «en los mayoristas donde nosotros compramos las cosas no se ve mucho lo de los precios cuidados, en el maxi consumo sí puede ser que haya. Pero no creo que nos afecte tanto. Los vecinos nos compran y no tenemos problemas. Además, no me parece que haya mucho precio cuidado…la mercancía no para de subir».
A fines de octubre pasado se había acordado en una reunión del Secretario de Comercio Interior de la Nación, Roberto Feletti, y la hasta entonces Subsecretaria de Acciones para la Defensa de las y los consumidores, Débora Giorgi, con las autoridades de las grandes cadenas de comercialización mayorista del país, avanzar en la coordinación, implementación y cumplimiento de la canasta de productos fijos hasta el 7 de enero de 2022.
El objetivo de la reunión fue plantear un trabajo en conjunto con las cadenas mayoristas para garantizar que los comercios de cercanía, como autoservicios y almacenes, no vean afectados sus márgenes de ganancia y puedan ofrecer la canasta ampliada del programa +Precios Cuidados.
Feletti les expresó a las cadenas mayoristas que deben retrotraer los precios de los productos que contiene la nueva canasta al 1° de octubre y que durante 90 días deberán operar con ese listado de precios fijos, para que los comercios minoristas y las cadenas más chicas no se vean perjudicados.
Sin embargo, pese a esos esfuerzos la realidad de los comercios minoristas es compleja. Los precios cuidados no surtieron efectos significativos para ellos, sino todo lo contrario. En la mayoría de los casos los perjudicó. Encima hasta ahora no pudieron garantizar un margen de rentabilidad suficiente para afrontar los costos en tiempos de alto consumo por las fiestas, pero también de una inflación por las nubes.
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