Como parte de las acciones por el cuidado del medio ambiente, Coca Cola, junto a su socia embotelladora Reginald Lee S.A. inauguraron días atrás, en pleno centro del distrito, una nueva estación de reciclaje. La misma forma parte «del compromiso global por Un Mundo sin Residuos», manifestaron desde la firma.
El objetivo es continuar «promoviendo acciones de sustentabilidad que contribuyan con el cuidado del ambiente», aseguraron. La estación tiene cuatro bocas y se instaló en la Plaza San Martín, en Avenida Néstor Kirchner entre 6 y 7. Allí todo aquel que esté interesado puede llevar sus residuos de plástico, vidrio y metales.
La iniciativa se suma a las acciones que viene realizando la compañía junto al municipio en el marco de “Bera Recicla”, un programa de recolección de residuos secos que comenzó hace más de cinco años y no para de crecer.
El objetivo es terminar recuperando el 100% de los residuos reciclables. Por eso el programa tiene presencia en todos los barrios y centros de reciclado, o eco puntos, coordinados por un equipo de trabajo que está abocado a la recuperación de los materiales que pueden tener «una segunda oportunidad» de ser convertidos en otro objeto de uso.
Cabe señalar que del evento participaron autoridades de la empresa junto al intendente, doctor Juan José Mussi, el subsecretario de ONGs, Marcelo Benedetti, y el coordinador del Programa de Reciclaje “Bera Recicla”, Alfredo Palavecino.
“Nos pone muy contentos poder fomentar la economía circular a través del trabajo que estamos haciendo junto al municipio de Berazategui desde el año pasado», señaló Pablo Teobaldo, director Comercial de Coca-Cola Reginald Lee, y agregó: “Las botellas que se juntarán aquí volverán a ser botellas gracias a este trabajo mancomunado».
Vale decir que los residuos plásticos son una problemática global que debe involucrarnos a todos y Coca-Cola, junto a sus socios, «asumió la responsabilidad y el compromiso de ser parte de la solución».
En la actualidad, en nuestro país, la compañía recupera y recicla el 54% de los envases gracias a la promoción de botellas retornables y al trabajo que lleva adelante junto a organizaciones y entidades de la comunidad, para elevar los índices de recupero y reciclaje de envases no retornables.
En este camino, a inicios de 2018, Coca-Cola anunció a nivel mundial el objetivo de recolectar y reciclar, para 2030, el equivalente a cada envase puesto en el mercado. Un Mundo Sin Residuos es, entonces, la visión que Coca-Cola está poniendo en marcha a través de un plan holístico, centrado en reducir el impacto a lo largo de todo el ciclo de vida del envase, desde su diseño, hasta su recolección, reutilización y reciclado.
Centro de Reciclado
En Berazategui, todo lo que se arroja en las estaciones de reciclado, como la que se inauguró recientemente, es transportado hacia los centros de acopio, donde se clasifica. Aquí nada se desperdicia. Es el caso del Centro de Acopio Nº 1, donde las paredes están hechas con botellas de PET y de vidrio, y los marcos de las ventanas improvisados con viejos neumáticos, todo esto le da una identidad propia al enorme galpón en el que cada mañana alrededor de 45 personas -en su mayoría mujeres– reciben, procesan y venden los residuos sólidos que separan en sus hogares los vecinos de la zona.
Este espacio está ubicado en el barrio Río Encantado, en Hudson, y es uno de los lugares del programa «Bera Recicla” que desde sus comienzos procesa toneladas de materiales que se pueden reutilizar.
“Al principio íbamos nosotras mismas a charlar con los vecinos y les contábamos cómo tenían que hacer para separar los residuos”, recuerda Alejandra Moreno, de la cooperativa que trabaja en el lugar. “Comprábamos bolsas verdes y marrones y se las dejábamos para que se sumaran –continúa–. Así, de a poco, algunos se empezaron a enganchar. Y al tiempo ya tuvimos que agrandar los carritos recolectores porque no dábamos abasto”.
Lo que empezó como una prueba piloto se fue extendiendo y hoy ya cuenta con 44 ecopuntos distribuidos en clubes infantiles, centros de jubilados y sociedades de fomento.
De a poco los vecinos entendieron la importancia de separar en origen, y se sumaron a la idea de que una ciudad limpia «la hacemos entre todos. Es la única manera de formar un círculo virtuoso, hacer nuestro aporte al ambiente y, además, generar puestos de trabajo”, explicó Alfredo Palavecino, coordinador General de “Bera Recicla”.
«Bera Recicla” cuenta con el apoyo de Reginald Lee, la socia embotelladora de Coca-Cola Argentina. A partir del programa municipal, todos los envases de PET que se recuperen –alrededor de 30 toneladas semanales– pueden reconvertirse en nuevas botellas u otros objetos, así le dan una nueva vida a todo ese material que de otra manera terminaría enterrado, contaminando el suelo.
Según estudios, son las generaciones más jóvenes las que son más conscientes de la necesidad de reciclar, para reducir los desechos, lo que es una buena noticia. Se espera que esta experiencia pueda replicarse a lo largo y a lo ancho de todo el país.
“Para nosotros es un orgullo trabajar codo a codo con el Sistema Coca-Cola de manera limpia, honesta y muy bien coordinada”, destaca Alfredo. Y Alejandra, con sus 19 nietos en mente, se anima a ir más allá y reflexiona sobre la importancia de que la economía circular siga escalando. “No se trata solamente de dejarles una casa o dinero, también hay que pensar en el planeta en el que van a vivir”.
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