Una encuesta hecha por la C\u00e1mara Argentina del Libro (CAL) sobre un total de 140 librer\u00edas revel\u00f3 que hubo una baja en las ventas que va del 26% al 50%. En esta l\u00ednea, La Palabra realiz\u00f3 un recorrido por los principales comercios del rubro y sus due\u00f1os nos relataron el duro momento que est\u00e1n pasando y c\u00f3mo hacen para mantenerse en pie.<\/p>\n

Leonardo Far\u00edas, titular de Praga Casa de Libros (13 entre 149 y 150), manifest\u00f3: \u00abEl 2020 y la mitad del 2021 no tuvimos temporada escolar, adem\u00e1s, estuvimos cerrados varios meses. En porcentaje estamos vendiendo menos que en a\u00f1os previos a la pandemia. Antes los chicos sal\u00edan de las escuelas,<\/span> pasaban por el negocio y les ped\u00edan a sus padres comprar alg\u00fan libro, esto se perdi\u00f3; ahora est\u00e1n en sus casas, van a la escuela pocas horas y las maestras no est\u00e1n pidiendo libros, les env\u00edan a los alumnos PDF, que adem\u00e1s es ilegal, porque no pueden copiar un libro. Lo mismo pasa con las fotocopias y las ventas que se hacen en los colegios,<\/span> comercializando a menor costo por un acuerdo con la editorial\u00bb.<\/p>\n

\u00abEl problema de estos dos a\u00f1os no fue la pandemia, fue el sistema que aplic\u00f3 el gobierno de cerrar todo, y los negocios que no somos esenciales nos estamos fundiendo\u00bb, apunt\u00f3 y marc\u00f3: \u00abLa gente quiere leer, pero no quiere gastar en libros, nosotros no somos la primera opci\u00f3n; hay otras cuestiones urgentes como la comida y los servicios, que con la subida de precios no permite a la poblaci\u00f3n darse un gusto\u00bb.<\/p>\n

\u00abTenemos precios razonables, vendemos libros usados y nuevos. Hay ejemplares que salen desde 100 pesos en adelante; sin embargo, la venta es muy baja\u00bb, declar\u00f3 y agreg\u00f3:\u00a0 <\/span>\u00abNecesitamos un compromiso del gobierno con los negocios que perdimos ante la pandemia, nosotros tenemos que pagar luz, tel\u00e9fono, alquiler, posnet, entre otras cosas\u00bb.<\/p>\n

\u00abHace 10 a\u00f1os que estamos en la zona y es la primera vez que vivimos algo parecido. Dos a\u00f1os sin temporada escolar y sin la fomentaci\u00f3n de las escuelas en la lectura de libros nos perjudican\u00bb, expres\u00f3.<\/p>\n

Por su parte, Leandro Mart\u00ednez, encargado de Factotum Libros (Avenida Mitre entre 10 y 11), cont\u00f3: \u00abLas ventas se mantuvieron parejas. No hubo una merma, porque,<\/span> la gente al estar en sus casas, se volc\u00f3 a la compra de libros. Si bien no podemos hablar de grandes ganancias, tampoco podemos hablar que se vendi\u00f3 mal, como en el a\u00f1o 2019, que s\u00ed tuvimos una ca\u00edda\u00bb.<\/p>\n

\u00abPudimos mantenernos estables porque hace 12 que estamos y tenemos clientes fijos; adem\u00e1s, supimos adaptarnos a las redes sociales. A partir de abril del a\u00f1o pasado no paramos de trabajar, fuimos r\u00e1pidos para trabajar de forma online, y esa estrategia nos ayud\u00f3 bastante para seguir adelante\u00bb, indic\u00f3.<\/p>\n

Y Consuelo Nieva, due\u00f1a de la librer\u00eda \u00abEl Aleph\u00bb (Avenida 14), dijo: \u00abVenimos de cuatro a\u00f1os de ca\u00edda en las ventas con el gobierno de Mauricio Macri y la llegada de la pandemia agrav\u00f3 la situaci\u00f3n. Si el gobierno anterior sosten\u00eda el plan de entrega de notebooks a los colegios, los alumnos pod\u00edan tener acceso a la informaci\u00f3n, el no tenerla hizo que padres y docentes pirateen libros de una manera impune. Toda esa cuesti\u00f3n afect\u00f3 al sector\u00bb.<\/p>\n

\u00abNos sostuvimos gracias al Programa de Asistencia de Emergencia al Trabajo y la Producci\u00f3n (ATP) que dio el gobierno el a\u00f1o pasado y el actual Programa Preservar Trabajo (PPT), eso nos permiti\u00f3 abonar los sueldos, y fue una ayuda enorme; porque las ventas que tenemos son para pagar sueldos, alquiler y gastos fijos\u00bb, se\u00f1al\u00f3.<\/p>\n","protected":false},"excerpt":{"rendered":"

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